Soliloquiaa

Nunca supe mucho sobre tener mascotas.
Mi primer cachorro se lo tuve que dejar a la señora que vendía caldo de gallina a la espalda de mi casa. Yo no sabía limpiar cacas de nadie y mi madre ya estaba harta de hacerlo.




Muchas cosas pueden suceder cuando abordas a una persona en la calle. 
Una de las últimas veces que me pasó, acabé acosada por un enfermero rocanrolero

con dificultades para entender las negativas.

Así que, cuando me topé con Verónica, me entró una suerte de pánico por convertirme 
en ese individuo que tan molesto me resultada.
La pensé mucho, pero cedí.

Y, por suerte, ella también.

- Verónica, Sola #54 @ Miraflores -









- Fàtima -




El día que creí haber visto a Dios. 
...
Pero no.






Este es Joseph y me bastaron 2 segundos
para tomarle estas fotos e imaginarme su mundo.


"De chiquito me metieron a hacer todos los deportes que yo eligiera.